¡LA MÚSICA ES GUANGA!
PROGRAMA DE RADIO
MAYTE ACOSTA
Se murió Juanga y creí que podría ser tema para reflexionar este viernes, pero también no sé si tengo mucho que decir. Podemos empezar reflexionando la importancia de la cultura popular en el desarrollo de los pueblos. De hecho y con todo lo que dos tres, cuatro cinco o seis seres por ahí o por ay, que se escribe sin hache pero que suena sin ella, pudieran espantarse, la verdad es que lo que conocemos como alta cultura, florece de acciones total y absolutamente del hacer cultural del populo, esto lo dijo ya Yuri Lotman en La Semiosfera. El otro día alguien se enojó porque dije que hay música popular de difícil ejecución por varias razones, por ejemplo la rítmica o el uso del tiempo. Esta situación finalmente, seguí diciendo, hace que un músico de conservatorio pueda tocar soberbiamente a Mozart pero difícilmente a Pérez Prado, con todo y las excepciones.
No es que la música elaborada por Juan Gabriel sea de difícil ejecución, algunos temas ocupan de una voz con determinadas características es cierto, y en eso no ahondaré para no complicarle el día a nadie, lo que habría que decir es que dijo lo que muchos querían oír, eso me queda esclarecido en mi vida, porque Juan Gabriel marcó ciertos momentos de mi infancia. La primera cosa es que la música mexicana, en general y sin discriminación alguna, ha invadido la radio cubana, desde que nació ese aparato mágico, y cada éxito era éxito en Cuba y lo que no lo era se volvía exitoso. Al menos mi madre retumbaba las paredes enmohecidas de mi casa con Querida, intentaba imitar el gritito singular ese de : AY, AY AY y la retahíla de frases que caracterizan algunas canciones de Albertito, aquella cosa pegajosa como: dime cuando tú, dime cuando tú, dime cuando tú , mi madre limpiaba toda la casa con la misma canción porque era interminable.
Cuando una amiga de la familia fue abandonada por su guaperrimo marido, creo que se fue con la secretaria, esa mujer rubia que te lo anda sonsacando, llegó el Juanga de México, el ídolo de Juárez, como dijo la voz de alguien en el programa HOY de hoy, a salvarla de una sumisión empedernida, logró aquella canción tipo peda de caída de alcantarilla, que esa mujer que decía no odiar a nadie, la poseyera de una catarsis, una especie de purga de sentimientos tormentosos, y hacer de la condición femenina, frente a una afrenta de escándalos maritales, una heroína para todas las de mi familia. Después de eso creo que mi madre se divorció, claro que ella utilizó a Benny Moré pa la purga, ahorita les explico porqué. Porque mi padre era un rogón después de que también le puso el cuerno con la secretaria, que también era rubia y que se lo sonsacó, mi madre solo cantaba desde la cocina: para que perder el tiempo, para que volvernos locos, si tu sabes que nosotros no nos comprendemos ya, quiero ver que tu comprendas, como yo lo he comprendido, que nuestro amor se ha perdido, como una estrella fugaz. Y se perdió caballero, se perdió, incluso mi papá que no lo veo hace años.
En fin que el tema de TE PARECES TANTO A MI fue parte de ese momento emblemático para la agarrada de huuuuumanidad que necesitaban las mujeres que rodearon mi infancia. Ahora podrán imaginarse a todas en el comedor escogiendo arroz y frijoles y cantando: y esa tonta que te quiere y que se enamoroooooo de tiiiiii, no sabe lo que le espera piensa que va a ser feliz, inocente pobre amiga no sabe que va sufrir, sobre aviso no hay engaño y se muy bien que ya te vas, dile a esa que hoy te ama, que para amarte y nada más, para eso a ella le falta, lo que yo tengo de más. La ultima parte es buenísima para un país como Cuba, porque como los cubanos creen que son los mejores del mundo, vaya, que ni dejándote el marido por otra te caes a pedazos, siempre pensarás que lo que se lleva no es mejor que tú, era difícil de creer eso para mi en la niñez, me preguntaba, ¿si ella tiene de más, por qué grita de dolor, con llanto en los ojos mojando la mesa, humedeciendo los frijoles?.
Y ahí es donde esta el problema, porque este tipo de música juega el papel de lo mundano de la humanidad. Por eso las telenovelas son exitosas, y estas tonadas de corte mas ligero, con lenguaje no elaborado, con música pegajosa, son productos de masividad, que toda sociedad necesita, es decir, lo popular de esta naturaleza es necesario, siempre y cuando se eduque a un pueblo en la educación estética, en la posibilidad de escoger lo que quiere, en determinar que la música, en este caso, funciona como el modo de entender el mundo, pero también como el modo de comprender tu mundo.
En su momento compositores como José Alfredo Jiménez fueron repudiados por la alta cultura, la simpleza de sus textos eran rechazados por la élite musical, pero José Alfredo es necesario para determinar el comportamiento de un pueblo como el mexicano, él lo entendió muy bien, y su música perdura en niveles de lo culto-popular, si es así un modo de decir algo que se valora. Es cierto que Juanga escribió más de 1500 canciones, dirían en la teletonta que es eso lo que lo hace el más grande compositor que ha dado México, es imposible ser clasificado de esa manera por una cantidad, porque no es la cantidad jamás signo de calidad. Consuelito Velázquez escribió mucho menos, pero con Bésame Mucho no puede un Abrázame muy fuerte. Cri Cri escribió como 240, pero LA MUÑECA FEA jamás la superará un NOA NOA y como es posible que ME CANSÉ DE ROGARLE, de José Alfredo Jiménez no pueda ser sugerida, con todos los vítores de 1 ante 1500, y por el amor de dios no se olviden de Maria Greber y su insuperable JÚRAME. Tengan cuidado cuando expresen ciertas cosas, la catalogación de la grandeza no es un asunto de gustos, es lo más objetivo que hay.
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MAYTE ACOSTA
Se murió Juanga y creí que podría ser tema para reflexionar este viernes, pero también no sé si tengo mucho que decir. Podemos empezar reflexionando la importancia de la cultura popular en el desarrollo de los pueblos. De hecho y con todo lo que dos tres, cuatro cinco o seis seres por ahí o por ay, que se escribe sin hache pero que suena sin ella, pudieran espantarse, la verdad es que lo que conocemos como alta cultura, florece de acciones total y absolutamente del hacer cultural del populo, esto lo dijo ya Yuri Lotman en La Semiosfera. El otro día alguien se enojó porque dije que hay música popular de difícil ejecución por varias razones, por ejemplo la rítmica o el uso del tiempo. Esta situación finalmente, seguí diciendo, hace que un músico de conservatorio pueda tocar soberbiamente a Mozart pero difícilmente a Pérez Prado, con todo y las excepciones.
No es que la música elaborada por Juan Gabriel sea de difícil ejecución, algunos temas ocupan de una voz con determinadas características es cierto, y en eso no ahondaré para no complicarle el día a nadie, lo que habría que decir es que dijo lo que muchos querían oír, eso me queda esclarecido en mi vida, porque Juan Gabriel marcó ciertos momentos de mi infancia. La primera cosa es que la música mexicana, en general y sin discriminación alguna, ha invadido la radio cubana, desde que nació ese aparato mágico, y cada éxito era éxito en Cuba y lo que no lo era se volvía exitoso. Al menos mi madre retumbaba las paredes enmohecidas de mi casa con Querida, intentaba imitar el gritito singular ese de : AY, AY AY y la retahíla de frases que caracterizan algunas canciones de Albertito, aquella cosa pegajosa como: dime cuando tú, dime cuando tú, dime cuando tú , mi madre limpiaba toda la casa con la misma canción porque era interminable.
Cuando una amiga de la familia fue abandonada por su guaperrimo marido, creo que se fue con la secretaria, esa mujer rubia que te lo anda sonsacando, llegó el Juanga de México, el ídolo de Juárez, como dijo la voz de alguien en el programa HOY de hoy, a salvarla de una sumisión empedernida, logró aquella canción tipo peda de caída de alcantarilla, que esa mujer que decía no odiar a nadie, la poseyera de una catarsis, una especie de purga de sentimientos tormentosos, y hacer de la condición femenina, frente a una afrenta de escándalos maritales, una heroína para todas las de mi familia. Después de eso creo que mi madre se divorció, claro que ella utilizó a Benny Moré pa la purga, ahorita les explico porqué. Porque mi padre era un rogón después de que también le puso el cuerno con la secretaria, que también era rubia y que se lo sonsacó, mi madre solo cantaba desde la cocina: para que perder el tiempo, para que volvernos locos, si tu sabes que nosotros no nos comprendemos ya, quiero ver que tu comprendas, como yo lo he comprendido, que nuestro amor se ha perdido, como una estrella fugaz. Y se perdió caballero, se perdió, incluso mi papá que no lo veo hace años.
En fin que el tema de TE PARECES TANTO A MI fue parte de ese momento emblemático para la agarrada de huuuuumanidad que necesitaban las mujeres que rodearon mi infancia. Ahora podrán imaginarse a todas en el comedor escogiendo arroz y frijoles y cantando: y esa tonta que te quiere y que se enamoroooooo de tiiiiii, no sabe lo que le espera piensa que va a ser feliz, inocente pobre amiga no sabe que va sufrir, sobre aviso no hay engaño y se muy bien que ya te vas, dile a esa que hoy te ama, que para amarte y nada más, para eso a ella le falta, lo que yo tengo de más. La ultima parte es buenísima para un país como Cuba, porque como los cubanos creen que son los mejores del mundo, vaya, que ni dejándote el marido por otra te caes a pedazos, siempre pensarás que lo que se lleva no es mejor que tú, era difícil de creer eso para mi en la niñez, me preguntaba, ¿si ella tiene de más, por qué grita de dolor, con llanto en los ojos mojando la mesa, humedeciendo los frijoles?.
Y ahí es donde esta el problema, porque este tipo de música juega el papel de lo mundano de la humanidad. Por eso las telenovelas son exitosas, y estas tonadas de corte mas ligero, con lenguaje no elaborado, con música pegajosa, son productos de masividad, que toda sociedad necesita, es decir, lo popular de esta naturaleza es necesario, siempre y cuando se eduque a un pueblo en la educación estética, en la posibilidad de escoger lo que quiere, en determinar que la música, en este caso, funciona como el modo de entender el mundo, pero también como el modo de comprender tu mundo.
En su momento compositores como José Alfredo Jiménez fueron repudiados por la alta cultura, la simpleza de sus textos eran rechazados por la élite musical, pero José Alfredo es necesario para determinar el comportamiento de un pueblo como el mexicano, él lo entendió muy bien, y su música perdura en niveles de lo culto-popular, si es así un modo de decir algo que se valora. Es cierto que Juanga escribió más de 1500 canciones, dirían en la teletonta que es eso lo que lo hace el más grande compositor que ha dado México, es imposible ser clasificado de esa manera por una cantidad, porque no es la cantidad jamás signo de calidad. Consuelito Velázquez escribió mucho menos, pero con Bésame Mucho no puede un Abrázame muy fuerte. Cri Cri escribió como 240, pero LA MUÑECA FEA jamás la superará un NOA NOA y como es posible que ME CANSÉ DE ROGARLE, de José Alfredo Jiménez no pueda ser sugerida, con todos los vítores de 1 ante 1500, y por el amor de dios no se olviden de Maria Greber y su insuperable JÚRAME. Tengan cuidado cuando expresen ciertas cosas, la catalogación de la grandeza no es un asunto de gustos, es lo más objetivo que hay.
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